¿Por qué brindar con champagne en Navidad y Nochevieja?
En toda mesa navideña que se precie, no puede faltar el cava o champagne cuando se acerca el final de la cena o comida. ¿Verdad que se ha dado cuenta? Si bien es cierto que en cualquier otro momento del año se brinda con algún tipo de vino, pero cuando llega la Navidad, brindar con champagne o cava es lo más habitual.
¿Por qué? ¿Existe alguna tradición que lo marca así? ¿Da mala suerte para los supersticiosos? Vayamos por partes.
¿Por qué se brinda con champagne?
Para responder a esta pregunta, nos tenemos que trasladar a la Antigüedad. ¿Cuánto tiempo atrás? Bastante, a decir verdad: a la época romana y Edad Media. Durante ese tiempo, el champagne estaba reservado para aquellas personas de la Aristocracia y de alta alcurnia. Precisamente en estos sectores de la sociedad, los fallecimientos por envenenamientos eran muy comunes.
Por ello, cuando se celebraban reuniones los asistentes cogieron como costumbre brindar con sus copas de champagne para que al chocar unas con otras, el vino espumoso pasara de una copa a otra con el movimiento. De esta manera, si una copa estaba envenenada, el contenido pasaba de una a otra y la persona que atacaba podía correr el riesgo de envenenarse también.
Eran listos, ¿hm?
La tradición fue pasando año a año hasta convertirse en algo más simbólico en celebraciones como las que tienen lugar en Navidad y en otras épocas del año. El champagne dejó de ser considerado una bebida de dioses y nobles y a día de hoy es habitual encontrarlo en los supermercados a distintos precios. Todos ellos tienen en la etiqueta del champagne las especificaciones concretas de la bebida.
¿Da mala suerte no brindar con champagne?
Para los más supersticiosos, siempre se ha dicho que brindar con agua da mala suerte. Mucha gente a la que no le gusta el champán o que no bebe alcohol, no brinda con champán y opta por otro tipo de bebidas, como el agua, un refresco o incluso vino.
Bueno, las supersticiones siempre han estado ahí, como comenzar el año pisando con el pie derecho, llevar ropa interior roja, mirar a los ojos al brindar… Son muchas, y depende de su persona el creerlas o no.
Pero… ¿Por qué no brindar con champán y mojarse los labios como gesto en Navidad y Nochevieja? ¡Sobre todo con las campanadas de fin de año y el comienzo del nuevo!
Champagne en Navidad
El consumo de champagne en Navidad incrementa como en ninguna otra época del año. Más allá del consumo personal, en nuestras cestas de Navidad y lotes de Navidad no pueden faltar una o dos botellas de este vino espumoso de la mejor calidad.
Esperamos que este año, brindar con champagne o cava, o el líquido elegido para cerrar la cena de Nochebuena o cualquier otra celebración del año, le traiga muchas alegrías y sonrisas en el nuevo año. Dejar atrás un año siempre trae consigo cambios, y desde Cestalia deseamos que todo lo bueno pase a partir de ahora en su hogar.
¡Feliz Navidad!